● La decisión ya es un hecho: la jueza Virginia Illanes presentó este lunes su renuncia formal ante el Tribunal Superior de Justicia y el Consejo de la Magistratura. En su escrito, la magistrada fundamentó su salida alegando motivos de salud mental, buscando cerrar su ciclo al frente del Juzgado de Instrucción 2 de Chilecito en medio de los fuertes cuestionamientos sobre su desempeño.
● El trámite, sin embargo, no es automático. Ahora el pliego con su dimisión deberá ser evaluado por las autoridades competentes para oficializar su desvinculación definitiva. Hasta que no se apruebe formalmente su salida mediante los instrumentos legales correspondientes, Illanes sigue sujeta administrativamente a los tiempos del Estado, aunque su voluntad de apartarse ya está firmada.
● La estrategia legal es clara: irse por sus propios medios antes de enfrentar un Jury de Enjuiciamiento. Si su renuncia es aceptada a tiempo, el proceso de destitución política se volvería «abstracto» (se cierra), permitiéndole evitar la sanción de inhabilitación para ejercer cargos públicos que conlleva una remoción forzosa. La situación llegó a esta instancia, tras varias denuncias realizadas por el abogado David Calipo.
● Un dato importante es que esta renuncia, si bien desactivaría el juicio político en el Consejo, no la exime de responsabilidades penales. Al perder sus fueros como magistrada, las denuncias en su contra pasarían a la justicia ordinaria, donde deberá responder como cualquier ciudadano ante las familias que siguen esperando explicaciones y sentencias en sus causas.
📳 Sumate ya a nuestro grupo de WhatsApp y no te pierdas nada









