Decenas de empleados denunciaron que no pudieron ingresar a sus puestos de trabajo, mientras el gremio aún no confirmó la cantidad exacta de desvinculaciones.
Unos 200 empleados de PAMI habrían sido despedidos, según informaron los propios trabajadores, quienes se encontraron con que el sistema no registraba sus huellas digitales al intentar fichar en sus puestos. Al menos 50 de ellos sufrieron esta situación en la Sede Central de Avenida Corrientes 650, donde se manifestaron junto a personal de seguridad privada.
Los despidos, todavía no formalizados, habrían sido comunicados de manera verbal por gerentes de área. Mientras tanto, los delegados de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN) aguardaron la llegada de su secretaria general para obtener precisiones sobre el número de afectados.
La situación generó tensión en el edificio central y otras sedes del organismo, donde los trabajadores se congregaron exigiendo respuestas. Este hecho podría impactar en el funcionamiento de la obra social, que ya enfrenta críticas por la falta de personal y demoras en la atención.
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