Un hombre en evidente estado de ebriedad protagonizó un insólito incidente en la esquina de Santa Fe y Balcarce, Rosario. Tras chocar contra un auto estacionado, el conductor dio positivo en el test de alcoholemia con un registro de 1,1 g/l. Mientras la grúa se disponía a retirar su vehículo, perdió el control nuevamente y chocó contra el vehículo de remolque.
Según testigos, el hombre admitió haber consumido alcohol en un cumpleaños la noche anterior. «Tomé dos o tres champañas, pero eso fue ayer», declaró a los agentes. Sin embargo, su comportamiento errático y dificultad para expresarse evidenciaron que no estaba en condiciones de manejar.
El Volkswagen Vento del conductor sufrió daños significativos, al igual que el auto estacionado que fue impactado inicialmente. Los agentes confirmaron que se procederá con las sanciones correspondientes y el retiro del vehículo.
Este caso vuelve a poner en debate la importancia de los controles de alcoholemia en las calles para prevenir accidentes y garantizar la seguridad vial.
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