● El Gobierno despidió a 110 trabajadores del Hospital Posadas, en Morón, y justificó la medida con auditorías internas que señalaron ausencias reiteradas. El anuncio coincidió con nuevas protestas en el área de salud por salarios insuficientes y recortes presupuestarios.
● El Ministerio de Salud sostuvo que los cesanteados “no asistieron a sus funciones” y que se revisó cada legajo individualmente. Mientras tanto, en hospitales como el Garrahan se mantuvieron paros por tiempo indeterminado, motivados por condiciones laborales y falta de insumos.
● La cartera también anunció el descuento de haberes a quienes participaron de esas medidas de fuerza, aludiendo a la Conciliación Obligatoria. La Secretaría de Trabajo canceló el diálogo con ATE tras denunciar “incumplimiento deliberado” del sindicato.
● Las acciones del Ejecutivo provocaron fuerte rechazo de los trabajadores sanitarios, quienes denuncian «política de ajuste estructural en salud, bajo el argumento de eficiencia, sin atender los reclamos por sueldos congelados y vaciamiento institucional».
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