Rafael Ocampo, abogado defensor del único imputado por el crimen de Emir, solicitó el sobreseimiento de su cliente argumentando la falta de pruebas y testigos que lo vinculen al hecho. “No hay ningún testigo lamentablemente”, expresó el letrado, insistiendo en que no existen elementos que incriminen al acusado de forma directa.
Mientras tanto, en La Rioja se están realizando las pericias químicas que podrían arrojar nuevas pistas en el caso. Aunque los resultados aún no han sido entregados, Ocampo señaló que la situación procesal del imputado debería resolverse sin cerrar la investigación, ya que las pruebas que se encuentran en análisis podrían modificar el curso del expediente.
Entre las evidencias recolectadas en la escena del crimen, figuran muestras de sangre que deben ser cotejadas para determinar si corresponden a los involucrados. Ocampo afirmó que, hasta no tener los resultados definitivos, prefiere no dar detalles por una cuestión de estrategia. “La sospecha sigue vigente, pero hay que esperar a que las pruebas confirmen si hubo más personas involucradas”, sostuvo.
La resolución final dependerá de lo que determinen las pericias, que se espera arrojen claridad sobre los hechos.
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