Mario Russo dijo que la vacuna por ahora «no es efectiva para mitigar el brote» y pidió «atacar el vector» en los domicilios. Aceptó que hay falta de repelentes y lo atribuyó a «un cuello de botella que se va a subsanar». El funcionario nacional aclaró que, según los datos disponibles, «la vacuna no es efectiva para mitigar el brote», recalcó que el faltante de repelentes «se va a subsanar» y pidió hacer prevención en las casas. «Esto no es covid, es otra cosa», remarcó.
En medio del pico histórico de casos, el ministro de Salud de la Nación, Mario Russo, rompió el silencio y se refirió a la problemática del dengue en la Argentina, que ya dejó 129 muertos en la temporada epidémica.
El funcionario nacional aclaró que, según los datos disponibles, «la vacuna no es efectiva para mitigar el brote», recalcó que el faltante de repelentes «se va a subsanar» y pidió hacer prevención en las casas. «Esto no es covid, es otra cosa», remarcó Russo.
«La mirada que tenemos nosotros, como órgano rector que define calendarios de inmunización, es de suma prudencia. La vacuna que aprobó ANMAT ha superado la fase 3, se mostró segura y eficaz en personas de 4 a 16 años. Ahora bien queremos recabar datos finales de fase 4, en Argentina y Brasil, para con la Comisión Nacional de Inmunización y ver en qué regiones y grupo etario sería útil aplicarla», explicó el ministro de Salud sobre la vacuna contra el dengue.
Russo fue enfático con su mirada prudente sobre el asunto: aclaró que, de acuerdo a la información disponible y según la caracterización de la Organización Panamericana de Salud, «esta vacuna no es de utilidad, no es efectiva, para mitigar un brote». Y al respecto añadió: «Se necesitarían casi ocho años para mitigar el brote».
Tras asegurar que en los próximos 60 días habrá una decisión sobre la vacunación, pasó a otro tema que preocupa: la falta de repelentes y espirales contra los mosquitos.
En ese sentido, Russo relativizó el faltante y dijo que es una realidad que tienen «clara pero que es heterogénea», aunque concedió que en regiones como el AMBA se generó «un cuello de botella que se va a subsanar».
El ministro de Salud abordó la falta de productos para combatir los mosquitos ante el brote de dengue, pero sostuvo que es «un problema de oferta y demanda que se va a subsanar».
«Es un problema entre la oferta y la demanda», aseguró el ministro, en diálogo con Radio Continental.
«Hablando con ministros provinciales, dijeron que algunos laboratorios de producción estatal, provincial, están generando en más cantidad», agregó Russo.
«Estamos adaptándonos a una nueva realidad epidemiológica», aceptó el funcionario nacional, minutos después de que el Ministerio de Salud sacara un comunicado sobre la situación del dengue.
