● La crisis educativa en Catamarca escaló cuando más de 20.000 docentes autoconvocados protestaron contra el decreto 884, que establecía un nuevo régimen de cobertura de cargos. La presión obligó al gobernador Raúl Jalil a derogarlo.

● Docentes denunciaron que la medida habilitaba cierre de cursos, eliminación de horas cátedra y pases a disponibilidad, mientras los sindicatos permanecían en silencio. Jalil justificó la reforma por restricciones presupuestarias y falta de apoyo nacional.

● Tras la derogación, la tensión continúa. Docentes convocan a una nueva marcha exigiendo una mejora salarial del 30 %, lo que podría extender el conflicto.

● El Gobierno provincial promete negociar en junio, tras pagar aguinaldos. La incertidumbre crece ante un posible paro total del sector público.

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