Gustavo Sáenz encabezó una manifestación frente a Casa Rosada para reclamar obras prometidas para Salta y el norte argentino. El ministro Guillermo Francos salió a dialogar y postergó definiciones hasta después de las elecciones.
El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, cumplió su promesa de protestar en Buenos Aires si las obras comprometidas para su provincia no comenzaban. Frente a la Casa Rosada, reclamó la ejecución de proyectos firmados en junio del año pasado y ratificados en marzo, que siguen sin avances.
Sáenz criticó la falta de gestión nacional y denunció que “el norte argentino sigue siendo postergado por todos los gobiernos desde que nació la patria”. Aseguró que las rutas en la región “están destrozadas” y las calificó como “rutas de la muerte”.
Durante la protesta, el ministro del Interior, Guillermo Francos, bajó a dialogar con los manifestantes. Ante el reclamo del mandatario salteño, respondió: “Estamos en época de campaña, después de las elecciones veremos”.
El gobernador advirtió que continuará exigiendo obras de infraestructura y que su reclamo representa “la voz de un norte cansado de esperar”.
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