El presidente de la Universidad de Chile, Michael Clark, habló luego de los violentos incidentes que obligaron a suspender el partido contra Independiente en Avellaneda.
Advirtió que primero debían confirmar el estado de salud de los hinchas heridos, muchos de ellos muy graves, antes de discutir responsabilidades. Comentó que fue “una tragedia” y que “lo futbolístico quedó atrás”. Recalcó que, por milagro, no hubo víctimas fatales y confirmó que aproximadamente 97 personas quedaron detenidas, incluyendo mujeres y menores. Su mirada fue clara: primó la prioridad de proteger a “nuestra gente” y solo después, analizaría lo ocurrido durante el partido.
La violencia estalló en el segundo tiempo, cuando hinchas de la U lanzaron objetos y provocaron destrozos; luego, barras locales ingresaron a la tribuna visitante, golpearon a varios fanáticos y hasta hubo caídas graves desde las tribunas El País+2El País+2ElHuffPostDiario AS. La Conmebol canceló el encuentro y ya inició una investigación con miras a aplicar sanciones según su reglamento Cadena SERDiario AS.
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